martes, 3 de agosto de 2010

Por amor

Por amor nos levantamos cada día a las siete en punto, esperando que a las ocho empiecen a escucharse sus voces.

Por amor compartimos la comida, el tiempo, el estudio, la limpieza y los momentos de risas y llanto.

Por amor dejo que me trencen el pelo tres o cuatro pequeños de dos o tres años, o que me jalen la polera (me estiren de la camiseta... todo se pega) o se me peguen a las piernas.

Por amor pierde Raquel la voz indicando "izquierda, derecha, molino, atrás" una y otra vez, sólo por verles las caras de ilusión mientras bailan.

Por amor Julio pasa horas en la cocina haciendo el pan mano a mano con ellos, pelando verduras, jugando a fútbol hasta bien entrada la noche.

Cada día, montones de amor se reparten en este sitio. No sólo el que nosotros damos a manos llenas, porque lo merecen y lo ganan en cada sonrisa, sino el que ellos nos brindan con una generosidad que pasma... nos regalan abrazos, besos, no se cortan al besar, al decirte que te quieren. Te dan pequeñas postalitas donde pone tu nombre y habla de la amistad... y te escriben que eres su amiga y que no te olvidarán.

Aquí se vive día a día sumidos en ese amor que se lleva dentro y que se reparte sin medida cuando sabes que puedes, que no hay intereses, que no hay engaño, que todo es limpio.

Esta semana es corta. El viernes es día feriado y el jueves hay desfile escolar. Allí estaremos, viendo orgullosos cómo nuestros chicos desfilan bien hermosos, dando ejemplo.

El sábado nos vamos todos de excursión, desde los pequeñines de Benedetta hasta los mayores... sabemos que será un gran día. Vamos a poner empeño en preparar ese día con ilusión, para que ninguno de nosotros lo olvidemos nunca.